La carrera de Martín Palermo se puede analizar desde diferentes ópticas: campeonatos, goles (ya sea por la enorme cantidad o la espectacularidad de muchos de ellos), récords, lesiones y anécdotas. Y, aunque pasan los años, el Loco no deja de sorprendernos. En la última semana no sólo marcó 4 tantos sino que además convirtió uno desde cuarenta metros. ¡Y de cabeza!
A pesar de que los momentos salientes de su carrera son de público conocimiento, merecen ser recordados. El optimista del gol, como lo bautizó Bianchi, está escribiendo una excelente e insólita trayectoria. Martín Palermo es sinónimo de todo esto: 274 goles y 14 títulos; máximo goleador en la historia de Boca (209 tantos en 336 partidos); un gol de penal con las dos piernas; un tanto colgándose del travesaño; dos goles en una final intercontinental; goleador récord en un torneo corto (20 tantos en 19 encuentros); siete goles en siete días (4 a Gimnasia y 3 a Estudiantes); tres lesiones graves (dos de ligamentos cruzados y una fractura expuesta mientras festejaba un gol); tres penales errados en un mismo partido; un gol a River en cámara lenta en su regreso a las canchas; un tanto de atrás de mitad de cancha; cinco goles en la selección (3 en 1999 y 2 en 2009), y mucho más...
En reiteradas ocasiones se barajó la posibilidad de realizar una película o escribir una novela con la trayectoria de Palermo. Sin dudas, se la merece. Su gol 100 en el fútbol argentino fue con los ligamentos cruzados rotos, y el 200 desde cuarenta metros y con la cabeza. Un verdadero Titán.
Hoy Palermo agradece que San Martín de Tucumán no lo haya querido a préstamo en 1995. Y el mundo del fútbol le agradece a él sus goles y, también, sus hermosas locuras.
Continuará...
lunes, 5 de octubre de 2009
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Menos mal que cerré la notita con un "Continuará...". ¡Qué fenómeno este Palermo! Un nuevo capítulo para su libro o una escena crucial de su futura película. Juan Pablo Varsky ya tiene actor principal y título para el film. No se pierdan la nota que escribió en La Nación el lunes 12 de octubre. BRILLANTE. Máximo Randrup.-
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