Dos clásicos

Según la Real Academia Española "clásico" significa "típico, característico". El último fin de semana hubo un nuevo capítulo en dos de ellos, que tienen que ver con la historia mundialista. Uno comenzó en 1954, en la Copa del Mundo de Suiza, y el otro en 1966, en la edición que se jugó en Inglaterra.

El primero tiene que ver con la familia Hernández, de México. El delantero de la selección azteca, apodado Chicharito, quien fue titular el domingo contra la Argentina, convirtió dos goles en Sudáfrica. Lo curioso es que su abuelo disputó el Mundial del 54 y su padre fue parte del plantel mexicano en el 86. Y hay más: su única hermana sería una de las integrantes del plantel para la Copa del Mundo de fútbol femenino 2011, que se jugará en tierras germanas. Una familia, tres -y quizás cuatro- Mundiales.

El segundo clásico se vincula a un partido entre dos selecciones íntimamente relacionadas a la historia de la Copa del Mundo: Alemania vs. Inglaterra. Ayer protagonizaron un nuevo enfrentamiento y el conjunto teutón pasó al frente en el historial mundialista.

Antes del partido en Sudáfrica habían jugado en cuatro oportunidades. Triunfo de Inglaterra por 4-2 en la final de 1966 (con un gol polémico de los británicos que picó en la línea), victoria de Alemania por 3-2 en los cuartos de final de 1970, igualdad sin goles en la segunda fase de 1982 y empate 1-1 (con triunfo germano por penales) en la semifinal de 1990. Lo negativo para el seleccionado argentino es que cada vez que Alemania enfrentó a Inglaterra por Mundiales terminó en el podio. Esperemos que se corte esa estadística...

El ejemplar sudafricano del partido entre alemanes e ingleses presentó dos curiosidades principales. Al igual que en el 66 hubo un remate que dio en el travesaño y luego pasó a la eternidad (además de la línea por un metro). El otro hecho insólito es que los 22 futbolistas titulares pertenecen a sus respectivas ligas nacionales: los once germanos juegan en la Bundesliga y los once británicos en la Premier League.

La familia Hernández y el derby entre Alemania e Inglaterra, dos clásicos mundialistas con varias décadas de historia.