¿Sabías que...?

- Hacía ocho años que Colón y Unión no se enfrentaban y doce que no lo ganaba el Tatengue. El último triunfo albirrojo había sido en 1999: 2-0, con goles de Lautaro Trullet y Andrés Silvera.

- El clásico santafesino es el más parejo del fútbol argentino. Se enfrentaron en 77 oportunidades, con 25 victorias por bando y 27 empates.

- Este derby se jugó tanto en Primera División como así también en la segunda categoría. Unión cuenta con más partidos ganados en la A (13 a 11), mientras que Colón ganó más en lo que hoy se conoce como B Nacional (14-12).

- El primer clásico de Santa Fe se jugó en 1948 y fue con triunfo para el Sabalero por la mínima diferencia. Sin embargo la primera victoria en Primera fue del Tatengue, en 1969, también por 1-0.

- La mayor goleada histórica le pertenece a Colón. El 12 de marzo de 2000 el rojinegro ganó 4-0, con goles de Esteban Fuertes, Claudio Enría y Javier Delgado en dos ocasiones. La mayor goleada a favor de Unión fue 4-1, en 1959.

- El enfrentamiento con más goles fue en 1955. Colón, como local, venció a Unión por 5-4.

- Hubo un clásico que no se jugó en la ciudad de Santa Fe. Fue en 1981 y como Colón tenía la cancha suspendida jugaron en el estadio de Newell's. El resultado fue 1-1.

No pierde finales

Los últimos tres años del Barcelona han hecho que los periodistas se queden sin adjetivos calificativos. Doce títulos, con el detalle de que en 2009 se transformó en el primer equipo de la historia en obtener, en un mismo año, los seis campeonatos que se pueden ganar.

Sin embargo, lo más sorprendente es que no pierde finales. La excepción que confirma la regla se dio este año cuando Real Madrid ganó la serie decisiva de la Copa del Rey. Ese choque fue en el marco de cuatro superclásicos españoles en 18 días. El elenco de Messi salió mejor parado de esa serie y se quedó con la Liga y la Champions, los dos torneos más importantes para un conjunto europeo. Detalle general: Jugó trece finales y ganó doce.

Con el triunfo sobre Porto y la obtención de la Supercopa de Europa, Barcelona llegó a 16 copas internacionales (cinco en los últimos tres años). Quedó a dos de los Reyes, que son Milan y Boca, y si gana el Mundial de Clubes de diciembre quedará a sólo un paso. Periodismo de anticipación: si el conjunto de Josep Guardiola mantiene la base, los pasará en breve.

La respuesta a semejante superioridad se encuentra en la siguiente afirmación: este Barcelona es el mejor equipo de todos los tiempos.

¿Será cierto?

Es difícil ser noticia a nivel mundial si uno es futbolista y se desempeña en la Segunda División de Finlandia. La excepción a la regla es un arquero llamado Lassi Hurskainen. En junio convirtió un gol de arco a arco y su curiosa conquista recorrió los cinco continentes. Y hoy nuevamente causa sensación, con un video que él mismo subió a youtube. Las imágenes son contundentes y demuestran una precisión jamás vista. ¿Será cierto?

El 9 se esconde…

Hay jugadores que cuando las cosas no salen como se espera, tienen la capacidad y el temperamento como para asumir la responsabilidad propia y la de sus compañeros conduciéndolos por el camino correcto. Se dice entonces que el jugador se pone el equipo al hombro.

Otros, en cambio, exhiben un espíritu más débil y flaquean o se desorientan sin saber qué hacer e intentan pasar lo más desapercibidos posible dentro de la cancha. Se dice, entonces, que el jugador se esconde.

Éste último caso es, precisamente, el del 9…

Por Dickie R. para futbolcurioso.blogspot.com

Otra rabona de Urbano

Sí, Matías Urbano volvió a convertir un gol de rabona. "Lo hago como recurso y no como fantasía”, dijo el delantero que marcó los dos tantos en el triunfo de San Felipe ante Deportes Iquique. Por estos días, el argentino es la gran atracción del fútbol chileno.

Genialidad

Poco para agregar ante semejante golazo. El autor de esta brillante definición es Matías Urbano, un trotamundos argentino que jugó en quince equipos y seis países. Hoy, con 30 años, brilla en Unión San Felipe de la Primera División de Chile. En el Apertura fue el goleador del campeonato y en el Clausura ya se despachó con tremenda conquista.

El hincha de Central, ¿es Canalla o Canaya?

Antes de comenzar a analizar si el apodo de Rosario Central es Canalla o Canaya, vale la pena explicar cómo surgió esa denominación. En la década del veinte los dos equipos de la ciudad fueron invitados a jugar un clásico amistoso a beneficio de los enfermos de lepra. Un conjunto aceptó (Newell’s) y el otro no.

Los hinchas rojinegros, en forma de cargada, empezaron a llamar Canallas a los de Central. Éstos, como respuesta, bautizaron como Leprosos a los fanáticos de su archirival. Lo curioso es que, con el paso del tiempo, ambas parcialidades aceptaron los apodos y hoy se sienten plenamente identificados con ellos.

Al recorrer las calles rosarinas y visitar el Gigante de Arroyito se comprueba fácilmente cómo la gente de Rosario Central se denomina a sí misma tanto Canalla como Canaya. ¿Por qué? La primera opción no presenta demasiados misterios y es porque así se escribe la palabra. Y la segunda alternativa nació de la mano de un genio: Roberto Fontanarrosa.

Varios años atrás al escritor y dibujante le encomendaron la tarea de realizar un logo que simbolizara a la institución. El humorista no sólo aceptó encantado (en la foto del medio se observa el personaje dibujado por Fontanarrosa) sino que, además, le escribió una carta a los simpatizantes. “En Rosario, Canalla tiene un significado totalmente distinto y es el de ser hincha de Rosario Central por eso me parece correcto escribirlo con la ‘Y griega’ que es, por otra parte, como vulgarmente lo pronunciamos”, explicó en un fragmento de la carta quien hoy es considerado uno de los máximos ídolos del club.

Desde ese momento, da lo mismo. La gente de Central se siente, por igual, Canalla y Canaya.

Por Máximo Randrup, desde Rosario.

Éste sí que se enojó con el árbitro

El fútbol brasileño siempre nos regala alguna curiosidad y en este caso llega desde la Segunda División. En el partido entre Vitória y Boa Esporte hubo un jugador que se enojó -y mucho- con el árbitro. Se trata de Rildo que le pegó una patada al juez del partido. ¿Lo expulsarán de por vida?

¿Futbolistas? No, ninjas

En los últimos tiempos en el fútbol apareció una moda muy poco saludable: las patadas voladoras. Hubo dos, en diferentes encuentros suspendidos por agresiones, que podrían haber resultado mortales. Fútbol Curioso no las celebra pero tampoco las oculta. Es difícil establecer cuál fue más criminal. Para ver y condenar.