Ya sea en el ascenso, en Primera División o en Europa, el fútbol siempre nos regala situaciones insólitas. Y el fin de semana que pasó no fue la excepción.
En el ascenso argentino, una vez finalizado el partido entre Platense e Instituto, se dio un hecho bochornoso. Alberto Pascutti, DT del Calamar, le dio una patada al entrenador de la Gloria, Marcelo Bonetto, luego de que éste le tirara una piña al secretario de prensa del conjunto local. Inadmisible, pero curioso al fin.
En la Primera División lo insólito tiene que ver con los dos punteros del campeonato. Ambos son equipos de los denominados chicos y no pertenecen a Capital Federal ni a la provincia de Buenos Aires. Los dos, Colón y Godoy Cruz, suman doce puntos producto de tres partidos ganados y tres igualdades. Además cuentan con la misma diferencia de gol (+3). Y eso no es todo: sus técnicos, Antonio Mohamed y Omar Asad, fueron destacados delanteros de la década del noventa y llevan el mismo apodo (Turco). De no creer.
En Europa, más precisamente en la liga de España, también se dio una situación singular. Sergio Agüero pidió el cambio por lesión y antes de que su DT concretara la modificación marcó un gol de cabeza. Un fenómeno.
Como se ve, las curiosidades en el fútbol no entienden de fronteras...
lunes, 1 de marzo de 2010
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como siempre las mejores situaciones son del ascensoooooo
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